Crónicas

Velilla de San Antonio: La bravura de Toros de Tenorio en una tarde completa

Polope y García a hombros en Velilla. Foto: Ksenia Tinyakova

VELILLA DE SAN ANTONIO (Madrid) Novillada sin picadores

Con un gran ambiente festivo en la localidad, cerca de 1000 personas acudieron a la plaza de toros de Velilla de San Antonio en la novillada sin picadores que suponía la recuperación de los festejos de luces en la localidad.

Se lidió un encierro con el hierro de “Toros de Tenorio” propiedad del ganadero local Don Raúl Tenorio, que propició una exitosa tarde y recibieron tanto empresa como ganadero la felicitación por parte de público y profesionales por el juego y presentación de la novillada.

Abrió plaza Álvaro Seseña con un novillo que si bien anduvo suelto en los primeros tercios, resultó una auténtica máquina de embestir queriendo todo por abajo en el tercio de muleta. Frente a él, Álvaro demostró su concepto clásico y personal rayando a gran nivel por ambos pitones. La demora del novillo en caer dejó el premio en una oreja, y una sonora ovación para el eral de Tenorio en el arrastre.

Seguidamente la sensación de la Escuela Taurina de Valencia, Miguel Polope, cortó una oreja frente a otro eral con posibilidades en la muleta. Dejó Polope pinceladas de su toreo de pellizco, con vistosos remates aunque sin descuidar el toreo fundamental, que brotó con trazo limpio especialmente por el lado derecho.  Oreja para el valenciano y palmas para el eral.

Saltó en tercer lugar “Cacareo” número 3, el cual había generado expectación fruto también de la singular campaña de promoción de Tauromanagement, que explicó la soberbia reata de la que provenía el novillo, que hizo honor a su sangre, siendo simplemente espectacular. Desde el capote permitió a Guillermo García demostrar porque es el novillero triunfador de la Comunidad de Madrid esta temporada. Desde el saludo a la verónica ligado con chicuelinas, dejó Cacareo patente su clase, recorrido y humillación. En la muleta, el fondo de casta y la transmisión del novillo permitieron componer una sólida faena por ambos pitones, donde el trazo largo de Guillermo nos permitió ver en todo su esplendor la excelente embestida del novillo. Estocada en lo alto que puso en sus manos las dos orejas, e indiscutible vuelta al ruedo para el excelente eral de “Toros de Tenorio”.

El cuarto bajó el altísimo nivel que tuvo la novillada. Frente a él, Álvaro Seseña hizo faena en terrenos de tablas, buscando la emoción que le faltaba a la embestida del novillo por la vía del arrimón. Capacidad y sitio demostró Seseña. Los fallos con la espada le privaron de la oreja que le hubiera permitido salir a hombros.

El quinto fue otro gran novillo de “Toros de Tenorio”. Bravo y con motor el castaño, permitió a Miguel Polope ahora sí desplegar toda su tauromaquia. Clásico, en los primeros compases, vistoso y pinturero en el tramo final. Cerró con ajustadas manoletinas. Actuación y tarde importante del valenciano por tierras madrileñas. Un pinchazo previo a la estocada puso en sus manos una oreja. Ovación para el novillo.

Con el sexto se remató una gran tarde de toros y toreros. Otro novillo con muchas posibilidades que permitió de nuevo paladear el gran momento de Guillermo García. El reiterado fallo a espadas dejó todo en ovación con saludos.

Con un tercio de entrada en tarde calurosa, se lidiaron erales de Toros de Tenorio, bien presentados y de muy buen juego, destacando el enclasado 1º, el excelente 3º de nombre Cacareo premiado con la vuelta al ruedo, el bravo 5º y el repetidor 6º.

Álvaro Seseña: Oreja y silencio
Miguel Polope: Oreja y oreja
Guillermo García: Dos orejas y ovación